domingo, 28 de marzo de 2010

Julie


Siempre ha tenido la capacidad de ser lo mejor de sus películas.
Julie Christie es lo mejor de "Darling", lo mejor de "Doctor Zhivago", lo mejor de "Petulia", lo mejor de "Lejos del Mundanal Ruido".


Sus títulos quizá ya no se vean con tanta emoción, parezcan pretenciosos y muchos de sus aspectos mueran, en definitiva, con el paso del tiempo.
Pero Julie Christie, la bellísima Julie Christie, posee la virtud de lo inalterable.


Fue Al Pacino quien la aclamó como la más poética de las actrices.
Se trata de una buena definición de una mujer tan especial como la Christie, tan alérgica a las etiquetas, tan hermosa, tan profunda.


Sus ojos enormes y tristes cautivaron el cine de los sesenta y fue una de las pocas que transitó victoriosa del Free Cinema inglés a las pantallas internacionales.


Le dieron un Oscar por su compleja "Darling".
Ella se emocionó mucho al recoger la estatuilla, y Hollywood supo que Julie era una niña tan frágil y duradera como el mejor de los cristales.


Se dice que fue Warren Beatty quien arruinó su carrera.
Durante años, fue su amante y su compañero, pero nunca ni su marido ni su hombre exclusivo.


Participaron juntos en varias películas, se pasearon de la mano por los escenarios de la jet-set y se preocuparon por la ecología.


Muchos dijeron que Julie debía dejar de hacer el tonto y, sobre todo, parar de rechazar películas. Nunca estuvo segura de ningún proyecto, ni siquiera cuando le sirvieron en bandeja de plata el perseguidísimo papel de Lara en "Doctor Zhivago".


A finales de los setenta, Julie decidió olvidarse de Beatty y volver a Gran Bretaña.
Se mostró especialmente combativa en terrenos sociales y políticos, convirtiéndose en el término medio entre Jane Fonda y Glenda Jackson.
Cada vez, quería menos películas y se apartaba sigilosa de los focos.


Julie Christie ha regresado muchas veces, siempre espléndida, con una madurez que deja sin aliento.


No ha querido entregar mucho de sí misma. Tal vez, ha sido consciente de que su aura era demasiado brillante.


Y ya se sabe que la contemplación prolongada de semejante fulgor sólo puede dejar ciego.

4 comentarios:

CaféOlé dijo...

Y tanto que sí: suscribo cada uno de tus comentarios. Ella es muy grande. Bss.

Lee Van Cleef dijo...

Siempre he pensado lo que dices nada más comenzar el post, que ella es lo más grande de sus películas. Su belleza durante un tiempo fue de otro mundo.
Sigo diciendo que no hubo otros tan hermosos como Warren Beatty y Alain Delon en su mejor momento y los dos destruyeron de un modo u otro a las mujeres que los amaron de verdad : a Julie Christie y a Romy Schneider.

Anónimo dijo...

Siempre me ha parecido la más guapa, con un toque de tristeza muy artactivo. A mí me gusta mucho "Shampoo", con Beatty, salen los dos guapísimos.

Bárbara Jersey dijo...

Amo a Julie, sr. Montez, y usted se ha superado con este post. Sin embargo, sigo pensando que el joven Terence Stamp le da mil vueltas a Warren.