jueves, 21 de octubre de 2010

Furia y Paz de Robbie Williams


En cierta ocasión, fue el responsable de muchos llantos y desconsuelos. Sin importar los corazones que iba a romper, la temida noticia se publicaba: "Robbie deja Take That".
Los seguidores de la mejor boy-band de los noventa sintieron que esa marcha significaba el principio del fin del grupo. Y tenían razón.


El primer single en solitario de Robbie Williams se llamó "Freedom", y se expresaba como su carta de libertad tras años de tensión y turbulencia.
Porque muchos aseguran que Robbie no dejó Take That; lo invitaron a marcharse.


En sus problemas con el alcohol y la cocaína, confluía su descontento con el estilo musical de Take That, contra el que nunca pudo alegar gran cosa.
Su mal comportamiento y sus encontronazos con representantes y compañeros lo obligaron a abandonar el grupo en plena gira mundial.


Robbie se decía libre en 1996 y publicaba su primer disco. De repente, la canción "Angels" le daba la llave de un éxito descomunal.
Contra todo pronóstico y con entera justicia, Williams se hacía súperestrella de la música.


Sus siguientes albúmes confirmaron una escalada de alcance estratosférico. Robbie se confirmaba rápidamente como un showman versátil, ecléctico, sin miedo a nada.


Su descaro y su cara de loco combinaban a la perfección con sus pretensiones de Sinatra, de James Bond, de divo del rock y de apologeta de la ambigüedad.


Detrás del escenario, Robbie Williams siempre fue el protagonista de una vida privada veleidosa, llena de adicciones, inseguridades y angustiosas batallas contra la enfermedad mental y la obesidad.


Como hombre, me gustó siempre, pero no quise reconocerlo en sus primeros tiempos.


Tuve que rendirme definitivamente a sus encantos, cuando vi lo rico que estaba en pijama, cortesía de "Somethin' Stupid", su dueto con Nicole Kidman.


Y su striptease sin complejos, a ritmo de "Rock DJ", fue la prueba incontestable de que Robbie está muy bueno.
Si a eso se le añade el exquisito acento british que posee, este Montez está completamente conquistado.


Como faro estilístico, Robbie siempre ha buscado nuestra sorpresa.
Y, así, casi nos da un infarto general cuando leíamos una noticia inesperada.


Regresa a Take That. Y "The Flood" se llama el vídeo, que atestigua la reunión.
Tras tantísimo tiempo, Robbie hace las paces y vuelve a casa.


Y demuestra que, junto con Howard, disfruta de la madurez más favorecedora de los cinco chicos.
Hoy Robbie Williams se dice feliz y está casado con la actriz Ayda Field, mientras celebra, por todo lo alto, sus veinte años en el mundo de la música.


He aquí una verdad. Siempre nos ha encantado Robbie Williams, solo o en compañía de otros.


Pero su vuelta a Take That nos provoca una rara emoción en los que hemos sido admiradores del grupo.
Porque ya nos lo cantaba. Everything changes, but you.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

...(suspiro enorme)

Justo dijo...

La boda se celebró en el día del Orgullo más importante en UK, el de Brighton. Vendió la exclusiva al Hello!....

Como hombre siempre me gustó, y se ha sabido explotar muy bien, aunque a veces pareciera so full of himself. Y tiene algunas canciones muy bonitas.
Así que, hala, aprobadete.

Anónimo dijo...

me gusta mucho!!!!!....Robbie guapísimo .. :D