Si una película encuentra el justo punto entre el estilo y el exceso, es probable que me guste.
Si además retunea la Historia y tiene un truculento sentido del humor, me apasionará.
Por ello, yo también soy un inglourious basterd y amo a Diane Kruger.
Si además retunea la Historia y tiene un truculento sentido del humor, me apasionará.
Por ello, yo también soy un inglourious basterd y amo a Diane Kruger.
Hoy celebramos la película de Tarantino con un libidinoso paseo por sus chicos más guapos.
Pero también aprovecho estas breves líneas para recordar a su montadora, la gran Sally Menke, que fallecía el pasado martes en plena ola de calor en Los Ángeles.
Pero también aprovecho estas breves líneas para recordar a su montadora, la gran Sally Menke, que fallecía el pasado martes en plena ola de calor en Los Ángeles.
Se ha dicho mucho sobre "Inglourious Basterds", pero no he oído a nadie suspirar lo suficiente por su reparto masculino, excelsa mezcla de señores de varios países.
Algunos ya eran bien conocidos por todos nosotros.
Otros le deben al gran Quentin un importante espaldarazo a sus respectivas carreras.
Otros le deben al gran Quentin un importante espaldarazo a sus respectivas carreras.
Entre estos últimos, se encuentra el ardiente Michael Fassbender, actor nacido en Alemania, pero criado, vivido y bailado en tierras norirlandesas.
En mi opinión, es el que está más bueno de los basterds.
Es guapo, pelirrojo y tiene talento; milagrosa combinación para cualquier industria cinematográfica de ambos lados del océano.
Este verano, Michael ha sido "Centurion", mientras terminaba de dar nueva vida a Edward Rochester en enésima adaptación de "Jane Eyre".
En estos momentos, se prepara para convertirse en Magneto en la próxima entrega de los "X-Men".
Fassbender se ha asentado en Los Ángeles con todas las promesas del mundo, y sonríe abiertamente en estrenos y otros festejos.
Fassbender se ha asentado en Los Ángeles con todas las promesas del mundo, y sonríe abiertamente en estrenos y otros festejos.
Quizá Michael suspire por el estatus de Brad Pitt, ese nombre que llena cines desde que la memoria nos alcanza.
Además, hoy es el cincuenta por ciento de esa sociedad familiar-romántico-famosil conocida como Brangelina.
Además, hoy es el cincuenta por ciento de esa sociedad familiar-romántico-famosil conocida como Brangelina.
Brad se ha hecho mayor, pero sigue adorando el desaliño; al fin y al cabo, nació para la causa en los muy grunge años noventa.
Su intervención en la película de Tarantino habla de sus proverbiales ambiciones, más allá de ese soleado rubio que acaparaba los primeros puestos en todas las listas de hombres sexys.
Ahora es difícil encontrar una foto reciente en la que salga descamisado y/o emergiendo del agua. Ahora Brad sólo se fía de la barba, del smoking y de Angelina.
En preproducción, se encuentra un posible nuevo bombazo protagonizado por Pitt. Se llamará "Guerra Mundial Z", adaptación del best-seller de Max Brooks.
En preproducción, se encuentra un posible nuevo bombazo protagonizado por Pitt. Se llamará "Guerra Mundial Z", adaptación del best-seller de Max Brooks.
También rubio, pero decididamente más potente es el muy germánico Til Schweiger.
Era inevitable suspirar por sus carnes alemanas en "El Hombre Deseado", comedieta guilty pleasure, donde Til se pasaba el mayor tiempo posible en calzoncillos.
Todo un previo del Ryan Kwanten de "True Blood", sin ninguna duda.
Todo un previo del Ryan Kwanten de "True Blood", sin ninguna duda.
"El Hombre Deseado" fue uno de los mayores éxitos del cine alemán de los noventa, y confirmó a Til como cara frecuente en las producciones más varopintas de su país.
En "Inglourious Basterds", interpretaba a un agobiadísimo perro nazi, tan temible como buenorro.
Qué dilemas los de la pobre Soshanna.
Sobre todo, cuando aparece un agente de la esvástica, con el irresistible porte de Daniel Brühl, y se confiesa enamorado de ella.
Sobre todo, cuando aparece un agente de la esvástica, con el irresistible porte de Daniel Brühl, y se confiesa enamorado de ella.
El niño de "Goodbye, Lenin" es un actor germano-catalán, de boca intrigante, mirada triste y perenne aire juvenil.
Su bilingüismo le ha permitido diversificar los orígenes de sus películas.
Hasta el momento, su interpretación más aclamada ha sido el anarquista y atracador Salvador Puig Antich, en el biopic de Manuel Huerga.
A Daniel todavía le queda dar una campanada definitiva.
Hasta el momento, su interpretación más aclamada ha sido el anarquista y atracador Salvador Puig Antich, en el biopic de Manuel Huerga.
A Daniel todavía le queda dar una campanada definitiva.
Lo dicho. Guapos a montones en una Segunda Guerra Mundial inventada, cinefilizada, tarantinizada.
Y lo susodicho. Me quedo con Fassbender, que no Fassbinder.
Y lo susodicho. Me quedo con Fassbender, que no Fassbinder.
5 comentarios:
¿Dónde dejaste a Christoph Waltz?
:(
Hombre, Christoph Waltz no es precisamente maromo...
debo confesar que estoy adicto a su blgo, llevo ya un par de horas mirando entrada tras entrada, deleitandome con las letras, y claro, con las fotos. Gracias y me alegra que continúe con estre blog.
Muchísimas gracias!
¡Qué buena película! Es mi favorita de Tarantino, además me reí a mandíbula batiente.
Los maromos están muy bien, aunque no tengo un favorito claro -quizá Daniel Brühl-. Y no reconocí al actor de El hombre deseado, la vi ya hace mucho..
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