martes, 11 de marzo de 2008

Ser Hijo de Marlon Brando


Una serie de televisión bastante deseada y jugosa podría inspirarse en la vida y en la familia de Marlon Brando.
Tiene todos los ingredientes necesarios para triunfar. Un patriarca que da el sentido último a la palabra "excentricidad", once hijos, cuatro esposas, fiestas de Hollywood, islas del Pacífico, hamburguesas escondidas en el jardín y dos Oscars.
Y, al final, una sucesión de acontecimientos, que convirtieron a la familia Brando en la mezcla perfecta entre tragedia griega y laboratorio freudiano.

Christian Brando era el mayor de sus hermanos, fruto del primer matrimonio de Brando con Anna Kashfi, de la que se divorció poco después de nacer Christian.

Cheyenne es la quinta de entre los retoños Brando y la segunda hija de la legendaria Tarita, la joven polinesia de la que Marlon se enamoró durante el rodaje de "Rebelión a Bordo". Fue ahí donde comenzaría la obsesión de Brando por Tahití, que duraría hasta su muerte.


Tanto Christian como Cheyenne vivieron largo tiempo a la sombra de su famosísimo padre, hasta 1990. La casa de campo que la familia poseía en Beverly Hills fue testigo de un disparo mortal.

El fallecido era Dag Drollet, amante tahitiano de Cheyenne y padre del hijo que ella esperaba.
Y el portador del arma era un borracho Christian, que fue detenido por la policía y acusado de asesinar al amante de su hermana.


En principio, Christian aseguró que la muerte de Dag había sido accidental, pero finalmente se declaró culpable bajo el cargo de asesinato sin premeditación.

El juicio de Christian fue publicitado hasta la saciedad y tuvo su momento cumbre en el emocionado testimonio de Marlon Brando. Aseguró que había fallado en la educación de su hijo y que se sentía muy arrepentido.
La familia de Dag Drollet acusó a Marlon de ofrecer su interpretación definitiva, para salvar a su hijo.

Pero la estocada definitiva fue la desesperación de Cheyenne. Volvió a Tahití, dio a luz a su hijo Tuki e intentó suicidarse con una sobredosis de barbitúricos.


Se le diagnosticó esquizofrenia y se aisló de sus familiares y amigos. Perdió la custodia de su hijo y en 1995, se ahorcó. Sólo tenía veinticinco años. Ni su padre ni su hermano Christian fueron capaces de asistir al funeral.

Condenado a diez años de prisión, Christian fue liberado en 1996. Murió el pasado enero de una neumonía.

Mientras, Tuki Brando, hijo de Cheyenne y Dag, es ahora modelo de Versace.

2 comentarios:

Rodrigo dijo...

No se la razón exacta, pero he de decirle Don Josito, que me ha encantado este post, si señor.

Josito Montez dijo...

Será porque disfruté mucho escribiéndolo.
Muchas gracias, beibi. ¡Sonrojao me has dejao!