De sedoso pelo rubio, voz ronca y mirada gatuna, Kathleen Turner ofreció una poderosa mujer fatal en "Fuego en el Cuerpo", su primer papel cinematográfico.
Desde ese momento, se la comparó con Lauren Bacall.
Desde ese momento, se la comparó con Lauren Bacall.
Se cuenta que Kathleen, que tiene fama de deslenguada, se encontró con la Bacall en cierta ocasión y le dijo: "Yo soy la joven tú".
En cualquier caso, Kathleen Turner se confirmó pronto como una actriz de identidad propia y escrupuloso gusto, más versátil y ambiciosa de lo que fue nunca la Bacall.
"Tras el Corazón Verde" (Romancing the Stone), aventura romántica junto a Michael Douglas, fue un éxito imprevisto y consagró a Kathleen como estrella.
Era entonces reclamada por directores como John Huston o Ken Russell, fascinados con esta mujer de armas tomar, capaz de llevar a la perdición a quien quisiera.
Ella, engreída como ninguna, aseguró que, si un hombre no la miraba una noche en un bar, debía ser gay.
Su luminosa presencia hacía que películas como "Peggy Sue Se Casó" parecieran buenas, aunque siempre tuvo fama de diva y de actriz difícil.
Terminaba los ochenta con sólo catorce títulos en su currículum, pero sin despeinarse y con el público a sus pies.
Terminaba los ochenta con sólo catorce títulos en su currículum, pero sin despeinarse y con el público a sus pies.
Fue la voz de Jessica Rabbitt, y decía una mítica frase que sonaba como una declaración de intenciones: "Yo no soy mala. Es que me han dibujado así".
Tras un par de descalabros a principios de los noventa, la Turner ofrecía su gran papel de culto, para John Waters en la desternillante "Serial Mom".
Fue entonces cuando se la diagnosticaba de artitris reumatoide, una enfermedad que obstaculizó su carrera, la apeó del estrellato y terminó por arruinar su privilegiado físico.
El tratamiento no fue demasiado efectivo, y Kathleen estuvo años sufriendo un dolor insoportable, que quiso aplacar con alcohol.
La bebida se convertía en daño colateral y en otra batalla que superar.
La bebida se convertía en daño colateral y en otra batalla que superar.
Para estupefacción del público, Kathleen Turner aparecía vieja y oronda en títulos como "Las Vírgenes Suicidas".
Sin embargo, Kathleen fue la primera en tomárselo con humor, y la prueba más contundente la obtuvimos en su aparición en "Friends", interpretando al papá transexual de Chandler.
Su esfuerzo ha permitido reconducir su carrera, combinándola oportunamente con la televisión. Las últimas noticias la sitúan en la serie "Californication".
El destello que conquistó a propios y extraños sigue vigente, y su voz continúa seduciendo.
Porque los mayores fuegos no se extinguen tan fácilmente.
Porque los mayores fuegos no se extinguen tan fácilmente.
5 comentarios:
Preciosa.
has hecho alguno de la pfeiffer?
esa es mi petición.
Sí, señor, y también fue a petición. Aquí fue: http://jositomontez.blogspot.com/2009/01/michelle.html
Esta es la actriz de los 80 que más absolutamente adoro, (junto con Amanda Donohoe).
Es fácil recordarla con cariño en películas como Peggy Sue, pero también en China Blue, (reconocido por crítica, fans y ella misma como su interpretación más fina), o en El turista accidental.
El destino es cruel con los seres más dotados y hermosos y Kathleen Turner es el triste ejemplo hollywoodiense que tú has tratado de endulzar. Me alegro que desde que se publícó su polémico libro de memorias parezca de nuevo fuerte y haya desarrollado la capacidad de reirse de sí misma.
Saludos.
L.A.
Esta semana precisamente he visto la tercera temporada de Californication y su papel es delirante, toda una parodia de si misma. En "Fuego en el cuerpo" derrite los polos pero de todas sus interpretaciones creo que me quedo con "Los asesinatos de Mamá", hay supe que además de una maciza como la copa de un pino era una señora muy lista.
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